13 COSAS QUE TODO POTIADICTO DETESTA

Llevo tres días en cama, con una fiebre del copón, que no recordaba desde mis años adolescentes, y con un montón de trabajos finales a medias. Así que he decidido haceros un post que no requiera montar focos y trípode y, de paso, reírnos un poco.
El otro día, hablando con unas amigas, me di cuenta de que hay cosas que solo nosotros entendemos. Todo y toda adicta al maquillaje, fan de la cosmética o friki de cualquier tipo de potingue, colorín y mascarilla, acaba con alguna de estas cosas poniendo cara de emoticono reojil, ese que te mira como si estuviese a punto de clavarte un objeto punzante en la vergüenza por decir o hacer tal atrocidad. Así que creo que, si Buzzfeed puede, nosotras también. Un post un poco diferente para que sonriáis o me digáis con cuáles os sentís identificados. Ahí va una recopilación de los peores momomentos para un potiadicto. ¡Vamos a echarle humor y dejar a un lado los prejuicios! 

1. Te doy un par de tonos más de la base que tu color, "para darte colorcito"

No quiero ser un Pou, gracias

Aún existen, vaya si existen, ese tipo de dependientas de droguería: ¿dónde tengo que parar de maquillarme con esa máscara de Colacao y Risketos, me decías? ¿En el perscuezo o en los tobillos? ¿Concurso en Tu cara me suena como la hija de Celia Cruz y Jason Derulo? ¿He inspirado Angelitos negros? ¿Me cogerán de Baltasar en la cabalgata de mi pueblo? Que alguien les descubra la magia del contorneado y el colorete.

2. "Pero si tienes cinco pintalabios rojos, ¡son todos iguales!"

We're done...

Malditos muggles...  Que tú seas daltónica no va a alejarme a mí de la felicidad de contemplar dos tonos de rojo bajo cinco luces diferentes hasta discernir sus destellos más infinitos y decidir cuál me pongo hoy. NUNCA SON IGUALES. 

3. "Me voy a echar esta sombra en crema blanca para iluminar la ojera"

Esa amiga suicida, a la que ves acercar lentamente su dedo impregnado en veneno blanquecino a su ojo, te hace siempre correr como alma que lleva el diablo gritando un NO que sale de tus entrañas. 

¿Cómo te explicamos ahora en cinco minutos que llevas toda una vida de customización de nadadora de mar abierto? ¿Cómo te digo yo que David Meca nunca estuvo de moda? ¿Cómo te explico que iluminar no es pintar de blanco titanio las ojeras para que los coches te den las largas como a un conejo?

4. "¿Porqué compras tanto maquillaje? ¿Eres rica?"

Really?

5. El momento drag queen frustrada

Es Nochevieja, hay una boda, es tu jodida graduación y quieres petarlo porque te han dicho que las Demi wispies de Ardell quedan "naturales y favorecen". Ahí que te plantas unas pestañas postizas.

Y ¡ay! esa pestaña que se te engancha con el aire, esa mirada perdida de Nenuco de tercera generación que se te queda. Esa mala hostia cuando el pegamento se te cae encima de cualquier otro elemento perfectamente pulido de tu cara durante veinte minutos. Ese alarido de terror que hace a tus vecinos temblar. 

6. Cuando Tráfico te homologa la cara como reflectante en autopista

Hay otras veces en las que no te das cuenta de tu error hasta que un amable y generoso amigo sube una foto hecha con flash al facebook y te etiqueta. En la escala están el guepardo, la velocidad de la luz y en primer puesto tú borrando la etiqueta. Pero el daño ya está hecho, tenéis amigos en común. Asúmelo. Esos polvos traslúcidos son una trampa, como la Coca-cola light, la biotina de Mercadona y los cereales con fibra.

7. Vamos a olvidar por un momento lo de parpadear con el rimmel fresco

Vamos a obviarlo. En serio. No quiero pensar en las 7:15AM. Next.

8. El delineado de una mujer es inversamente proporcional a su buen gusto

Porque está la destreza ninja en el maquillaje de Mulán y después estamos las mortales. Y entre ellas, las hay de todos los "grosores". 

Amy era Amy...

Cuando ves esas rayas que ni se estrechan ni se engrosan, que van de lagrimal a rabillo como una carretera de alquitrán recién puesta. Cuando ves ese crespón negro anunciando en ese final de ceja la muerte de la dignidad humana. En ese momento te das cuenta de que mientras esa persona te habla con toda su gracia y esmero, tú ya no estás allí. Tú estás en una mesa de luz diseñando con escuadra y cartabón la armonía de su eyeliner.

9. Ir al cine a ver un dramón es deporte de riesgo. Y dramón al cuadrado.

Alabemos al dios del waterproof.

10. La gente que se maquilla las orejas. Y mal. Y el cuello. Y el pecho.

Esa gente. Porque no conocen el límite de las zonas corporales. Y las camisas tienen un cerco color marrón como si la guardasen en el bote del colacao. Esa gente debería tener que pagar una multa o un impuesto por abastecerse de energía solar. O rayos UVA, o Risketos. O no sé. Materia prima alimento del ser humano.

11. Los ahumados que solo son delineados hasta la ceja 

Ese momento en el que la gente, o tú y yo, abrimos Pinterest y nos creemos que los tips de Beautydepartment son tan sencillos como los hacen ver #dimisiónya 

 Las hay que compramos decapante industrial cinco aros y terminamos con esa farsa indignante. Pero las hay que salen a la calle haciéndolo, y todo en los 6 pasos exactos del tutorial: uno de ellos es coger la puerta, otros cuatro mirarse al espejo y el primero de todos es echarse una onza de carbón en los párpados y soplar...
Oso panda, oso panda. Dime: ¿por dónde andas?

12. "Yo no uso maquillaje porque no lo necesito"

Ah... eh... Veo desde aquí el parche naranja.

13. "Y tú tampoco, si eres guapísima"

Soy consciente, lidia con ello

PD: todos conocemos la "superficialidad" del maquillaje y los demás comentarios sobre ser uno mismo. El maquillaje es un medio de expresión propio, con sus lenguajes, códigos y su propio humor. Para gustos colores, así que riámonos y tomémonos este post como lo que es: una broma.